16 jul 2009

Solsticio, Capítulo 13

Todos los personajes pertenecen a Stephenie Meyer. Pero la historia me pertenece a mí (Robin Cullen/Black).

Summary: Luego de la transformación de Jacob, su relación con Bella tomará otro rumbo, pero ¿puede una relación con un lobo ser segura? ¿Qué opinaran los Cullen al respecto? BxJ

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Ok, aquí está el último capítulo, me tardé muchísimo ya lo sé. 

Este capítulo puede ser...¿cómo decirlo? algo ¿macabro? acepto que me odien después de todo =S las entenderé, yo me odiaría sino hubiese sabido que esto iba a pasar, ¿no quieren sorpresas? vuelvan a leer el prefacio y piénselo bien

 


Capítulo 13. El final
Bella POV

Jacob se fue una vez entrada la noche, bajé a abrirle la puerta, le hice la cena a Charlie y luego me regresé a mi cama que aún conservaba el  calor, me acosté y me dormí inmediatamente.

Desperté alrededor de las diez de la mañana, como era domingo, Charlie estaba en casa. Al abrir los ojos, me di cuenta de que aún nevaba, había un aire grisáceo y un viento frío que no me afectaba, el calor de Jake se me había tatuado en el cuerpo, me abracé a mí misma, inhalando su olor. 
Me preparé desayuno y lo comí. Durante el desayuno no hice más que recordar el día de ayer. Subí nuevamente a mi cuarto y encendí la computadora, le escribí un correo a Reneé. Le conté lo bien que me sentía en Forks y sobre estos nevados días. Omití la parte del baile y claro está, no le conté mucho sobre mi día con Jake, sólo le dije que nuestra relación iba muy bien. Casi al instante me respondió, hablándome de Phil, de Florida y de lo feliz que estaba por mí. 
Escribirle a Reneé, me hizo recordar la propuesta de Jake, la cual seguro mi madre objetaría. Sin embargo, yo estaba casi segura de que mi respuesta sería un sí. Sin embargo, debía pensar con claridad, no podía tomar una decisión apresurada, aunque había muchos factores a favor, no podía omitir los que había en contra.

Los factores en contra, obviamente incluían a Charlie y a Reneé, y probablemente mi padre no se pusiera tan quisquilloso, porque él amaba a Jacob; el otro problema era la edad, sin embargo esto no era una razón de peso, Jacob no me iba a llevar hoy mismo a Las Vegas a declararnos “marido y mujer”, todo con calma, siempre decía que teníamos mucho tiempo.

Las razones a favor, en cambio, tenían la más fuerte de las bases: el amor. Aquel amor mutuo que nos teníamos, reflejado en cada segundo que compartía con Jacob. Sólo los recuerdos de la noche anterior me inundaban el corazón de dicha. Lo amaba, demasiado. 
Bajé las escaleras, de la cocina venía un olor a chocolate quemado  que me desagradó, Charlie estaba peleando con la olla de donde provenía el olor.
-Papá, ¿qué haces?
-Chocolate caliente o algo así–su cara reflejó el desagrado que sentía.
-Deja yo lo hago –sonreí y pasé a la cocina. 
-Bells, siento ser tan torpe en la cocina. 
-No te preocupes, ya estaba acostumbrada a cocinar en Phoenix.
Soltó la paleta de madera y me cedió la estufa.
-¿No tienes frío, Bells?
-Eh… no –dije mientras volvía a poner el chocolate en una olla limpia –supongo que me adapté.
-Pensé que te costaría más, pero me alegro que sea así. 
-A mí también.
Cuando terminé de preparar el chocolate, lo serví en una taza.
-Aquí tienes, papá. ¿Quieres algo más?
-No, gracias hija.
-Yo… hmmm, ¿no te importa que vaya a La Push ahora, o si?
-No me importa, pero me preocupa, nunca has manejado con nieve.
-Estaré bien. Te lo prometo. 
-De acuerdo. Telefonéame cuando llegues.
-Bien.
Busqué un abrigo, por si a las dudas, fui al auto y lo encendí. Las manos me temblaban de nervios, ¿y que si luego de darle mi respuesta a Jake me arrepentía? ¿O si conocía a alguien más? Me tranquilicé ante esa posibilidad, no habría otro. 
Conduje lento, la nieve caía sin piedad y la carretera estaba completamente cubierta. El parabrisas no tuvo ni un segundo de descanso y yo tenía un nudo desde el estómago hasta la garganta. Me tenía los nervios de punta lo que le iba a decir a Jake y la carretera que una vez más anunciaba peligro.

Jacob POV
Estaba en el bosque, había un vampiro nómada en la zona, pero yo no tenía ni el más mínimo interés en ir a atacarlo, sólo contaba con que el resto de la manada se pudiese hacer cargo. Después de pasar todo el día en casa de Bella, disfrutando cada segundo, Sam me había ordenado hacer guardia, estaba muy cansado, los ojos me pesaban, estaba seguro que así no rasguñaría ni a un vampiro anciano. Por esa razón, me quedé entre los matorrales, tratando de no pensar demasiado, para que no me ubicaran. 
La incomodidad y la preocupación me atacaban una vez más, como cada vez que entrábamos en fase. 
Vi en los pensamientos de Quil y Paul que ya tenían al vampiro acorralado, y ya Embry lo estaba comenzando a atacar. Seth se mantenía vigilando, ya que estaban bastante cerca de la línea enemiga, y los Cullen podían reclamar su territorio en cualquier momento, eso, sin duda me inquietaba más que el nómada. 
Cuando la sanguijuela no fueron más que restos, salí de fase para irme a mi casa, necesitaba con urgencia dormir, para luego ir a ver a Bella. 
-¿Dónde dejaste a tu manada? –dijo Sam con su asqueroso tono alfa. Volteé con la mirada oscura y rabiosa.
-¿Dónde dejé a mi manada? 
-Sí, creo que esa fue mi pregunta, Jacob. 
-¿Dónde dejaste tú tu manada, alfa?
-Te la encargué a ti.
-La parte de la manada que me encargaste está en el bosque, ya se encargaron del chupasangre y venían de regreso a La Push, pero ¿qué hay de la otra parte de la manada? Si no están de guardia, no son parte de tu manada –mi tono era desafiante.
-¿A qué te refieres?
-No hablas en serio, ¿o sí?
-Collin y Brady están en la playa…-aclaró de nuevo usando el tono alfa. 
-Collin y Brady están en la playa. Muy bien.
-¿Cuál es el problema, Jacob?
-Mi problema es el que debería ser el tuyo. Dime, ¿dónde está Leah?
-En su casa.
-¿Y qué hace allí, exactamente?
-No lo sé. Averigua tú si te causa tanto interés, está enferma es lo más que sé.
-No es posible Sam Ulley…Tú te crees que Leah está enferma…Sabes tan bien como yo que hay otro asunto debajo de eso. Sue no hace más que decir mentiras.
-Nadie tiene prueba de eso.
-¿Emily no te ha dicho lo que tiene?
-Dice que está enferma, es todo.
-Eres patético Sam, tu manada se está desintegrando porque Leah está ocultando algo y eso afecta a Seth, y lo que afecte a Seth afecta a T-O-D-A la manada, excepto claro, a ti, que parece no preocuparte nada –mi cuerpo comenzó a temblar, tenía la mandíbula apretada y los dientes me rechinaban. Pero esta vez no tenía intención alguna de calmarme, como la tenía con Seth. 
-Será mejor que te calmes, Black. Contrólate.
-Ah, no eso sí que no. Tú no eres mi jefe Sam. 
Sus ojos se tornaron más oscuros y desapretó los puños. Volvió a hablar pero esta vez su tono era distinto, ya no usaba el tono “alfa”
-No querrás desilusionar a tu tribu.
-Tampoco tú, dime ¿vas a averiguar qué le pasa a Leah?
-No es mi asunto.
Mi cuerpo tembló de nuevo y salté, entré en fase en el aire, rompiendo la ropa que llevaba. Sam reaccionó por instinto haciendo lo mismo. Gruñí. Esto ya había alcanzado un límite. Uno muy alto, ¿cómo era posible que no le importara Leah? Precisamente, Leah. La que sufría día tras día, porque el muy imbécil no había encontrado nada mejor que imprimar a su propia prima. 
Sam gruñó también. Me concentré en escucharlo, pero no había sonido alguno. Nada. Sólo mis pensamientos, aquella debía de ser la paz absoluta. Tampoco estaban los del resto de la manada, tal vez ya hubiesen salido de fase. 
Me abalancé sobre Sam, no dudé, comenzamos a pelear. Ninguno llevaba ventaja, Sam era un lobo monstruoso, era el más grande de la manada, pero yo sabía que tenía oportunidad de ganar, aunque claro no estaba en mis planes matarlo. Sonó la voz de Quil en mi cabeza “Jake es un superdotado”…pero no era un pensamiento que él estuviese teniendo en ese momento, era algo que mi memoria había rescatado, una frase vieja de él…Seguía peleando con Sam, seguía buscando cómo morderlo, arañarlo, lo que fuese que lo hiciese entrar en razón. En una le propiné un buen rasguño, me quedé esperando su respuesta, cuando se alejó hasta quedar lejos de mi alcance. 
Salió de fase en ese mismo instante y se colocó el pantalón. 
Respiró profundo y apretó los puños.
-Tú lo has dicho. Hay que escuchar a la manada.
¿Pero cómo la escuchaba si se había quedado muda? ¿O yo sordo? No, estaba escuchando a Sam, tal vez era una sordera mental. 
-Lo de Leah no tiene solución. 
Volví la mirada para encontrarme con el pelaje grisáceo de la única loba. No llegué a detallarla cuando ya había salido corriendo. Mi cabeza no paraba de hacer preguntas, y no había respuestas, ninguna voz que me respondiera, ni siquiera la de Leah. 

Aunque no fuese por lo que hice, Leah había salido de casa, eso debía significar algo bueno. 
Salí de fase y corrí a casa para vestirme, sólo tomé los pantalones, me prometí cuidarlo porque era el único que me quedaba completo. 
Cuando estuve vestido, Billy preguntó si estaba bien, le dije que sí y salí de la casa. Toda la manada estaba ahí –todos menos Leah claro –en su forma humana.
Examiné a cada uno, me veían diferente, extrañados, como pidiendo algo.
-No te vayas, Jacob –dijo Seth en un hilo de voz.
-¿Irme? No iré a ningún lado. Bueno, sí. Pero… ¿de qué hablas? 
Miré a Sam con la mirada cargada de furia. 
-Ya te fuiste.
-Claro, eso tiene mucha lógica… -rodé los ojos –no me importa, ¿sabes? No es de mi interés quedarme contigo y tu manada dividida. 
Caminé dándoles la espalda. Sólo quería irme a correr como loco, pero eso probablemente haría que me encontrara a Leah, y aunque quería saber qué le pasaba, no quería ir solo, no me atrevía a ser el único en su mente. 
-¿No te das cuenta? –dijo Seth acercándose a mí, mientras yo iba hacia la carretera.
-¿Qué? Ya te sientes mejor, ¿no? Tu hermana salió.
-No hablo de ella. Sino de ti, Jacob, dejaste la manada. 
-Ya basta Seth, sólo iré a la carretera, luego tal vez llegue a Vancouver, tal vez un poco más lejos. Hasta que me sienta listo para verle la cara a Sam…Aunque lo más probable es que sólo llegue a la casa de Bella, no iré a Vancouver, ¿te imaginas? Más de dos días sin ver a Bella, enloquecería antes…
-Jacob –me interrumpió –no nos escuchabas ¿cierto?
-No, ¿qué fue lo que me pasó? –si Seth tenía la respuesta, yo la quería. Seguí caminando hacia la carretera, había algo en ella, debía de estar loco, sentía el olor de Bella.
-Abandonaste la manada cuando le dijiste a Sam que él no era tu jefe. Ya sabes tú eres el alfa por excelencia, así que al decirle eso…pues, es como si hubieses asumido el cargo.
-Seth…tú eres un niño muy ingenuo. Sam les dijo eso para que me vean como el malo de la película.
-No, Jacob. Quil dijo que su abuelo le había dicho que eso era verdad.
-Pero no soy el alfa.
-Sí lo eres, eres el alfa de tu manada.
-Claro, la manada en la que estamos yo, Jacob, y el tal hijo de Billy, ¿no?
-Y yo –dijo bajito.
-Seth, si sabes lo que te conviene, regresa allá –volteé y señalé a los demás que ya se veían a lo lejos.
-¿Estás loco? ¿Tú crees que Leah no me ha transmitido todo ese odio a Sam? No voy a volver, sabes que serías un mejor alfa.
-Otra idea que Leah metió en tu cabecita. Mira, Seth, ahorita no estoy de humor, ¿sí? Si como tú dices, ahora tengo una nueva manada, Forks no es tan grande, no necesita dos manadas de lobos, y menos si está formada por un solo miembro.
-Dos –insistió.
-Lo que sea. No tendré una manada, no la necesito, ¿bien?
Un auto pasó a nuestro lado a una velocidad insólita, considerando que la nieve tenía cubierto todo el piso, y aún caía sobre nosotros, aunque yo no la diferenciaba de una llovizna, excepto por lo pesado que me era mover los pies.
Entonces lo sentí, de nuevo, el olor de Bella, se sentía tan cerca. 
-Parece que tienes visitas –dijo Seth en un tono diferente, como si estuviese sonriendo. Pero no volteé a verlo, me quedé viendo el viejo cacharro rojo óxido que se acercaba. 
Sonreí. Bella era lo único que me calmaría hoy.
Entonces, todo pasó muy rápido, el auto que iba a gran velocidad resbaló por la pista de hielo que se había convertido la carretera, se estampó contra el auto de Bella y yo comencé a correr inmediatamente. Sentí que Seth corría detrás de mí, mi velocidad no parecía suficiente. No, no. Era lo único que pensaba, no tenía fuerzas para entrar en fase para alcanzar mayor velocidad. El otro auto había chocado justo del lado izquierdo del auto. ¡NO, NO!
Separé un auto del otro, para encontrarme a Bella, golpeada justo en la cabeza, con una herida sangrante. Mi cuerpo temblaba, pero no para entrar en fase, sino de sufrimiento, sentía su dolor. 
Tomé su cuerpo entre mis brazos y comencé a correr en dirección al hospital, mis pensamientos no eran lúcidos, no sabía lo que hacía. Oía los gritos de Seth a mi espalda, intentando detenerme.
-Jake, no llegarás a tiempo.
Fue la única frase a la que estuve de acuerdo. La nieve me impedía correr lo suficientemente rápido. Cuando llegara al hospital, Bella ya se habría desangrado, yo daría toda mi sangre por salvarla, pero no estaba seguro de que mi sangre fuera compatible con la de algún humano. 
¡NO, NO!
Mis pies se movieron más por el instinto de lobo que por mi conciencia. Daría cualquier cosa por salvarla, hasta lo prohibido.
Cambié rumbo, Bella iría al doctor, pero iría a una diferente salvación.


Bella POV
Era difícil sentir algo en aquel momento, todo era lejano y oscuro. Recordaba con claridad que era de día cuando conducía hacia La Push, sin embargo, hoy la noche había llegado antes de lo esperado, se me dificultaba abrir los ojos. No sentía muchas cosas, sólo el calor que me sujetaba y la sangre, eso era algo que sentía con claridad. Aún en mi inconsciencia –porque estaba segura de estar inconsciente –el olor de la sangre me mareaba. 
La agonía era insoportable, dolor, era lo único que sentía. 
“Jacob, Jacob”, no lograba articular palabra, pero necesitaba decirle que no valía la pena, que me dejara ahí, quería que entendiera que era mejor soltarme, que no podía, que ya era muy tarde. Siempre había pensado que la muerte sería…apacible. Tal vez se sufría, pero aquello era terrible, no acababa, sólo más dolor. El mareo causado por la sangre, el calor de Jake  y luego su voz, me decía que resistiera, que luchara, pero yo ya no podía, sentía cómo cada vez perdía más sangre y todo se volvía más oscuro.
“Lo siento”, quería decirle que me perdonara, que entendiera que no quería que él sufriera, que por favor continuara con su vida. Jamás pude decirle que me casaría con él. Dolía eso, tal vez más que la muerte en sí. Sentía las lágrimas rodar lentamente por mis mejillas.
Comencé a oír nuevas voces ¿Ángeles? Por favor, eliminen el sufrir. No lograba distinguir ninguna voz, tal vez no conocía ninguna. Si eran ángeles, era obvio que no las conocía. 
“Por favor, Bella, haz que siga latiendo” alcancé a oír a Jacob. El calor de sus brazos debajo de mi piel se iba reduciendo, como si me estuviese dejando. Así era mejor, pero ¿por qué le pedía a mi corazón que latiera? O tal vez se lo pedía al suyo propio, eso, tendría más lógica y apoyaba su petición. 
Cuando pensé que me había dejado, el calor volvió a mi cuerpo, tal vez algo diferente, porque éste, realmente quemaba, jamás había sentido que el calor de Jake me quemara, tal vez porque era la última vez que lo sentía, tal vez porque ya no quedaba nada de mí.
Jacob suéltame, te lo pido. No lo hagas más difícil, déjame aquí…



Alice POV

Abrí la puerta cuando sentí el olor del lobo tan cerca, había pasado, lo dejé entrar, cargaba a Bella y le hice señas para que la dejara en el suelo.

-Carlisle –grité desesperada.
-No lo hagan, ¡No! –gritaba Rose.
Carlisle estuvo en el piso de abajo en un segundo.
-Es una súplica –dijo el lobo con las lágrimas agolpadas en sus ojos.
-Estará bien.
-No eres consciente de lo que estás pidiendo –le bramaba Rosalie –vete ahora mismo y llévala al hospital. No quieres esto. ¡Vete!
-Sólo quiero que viva, por favor –su voz era un susurro, no había ni rastro del odio a nosotros. Estaba dispuesto a entregar el amor de su vida a la mano enemiga.
Busqué a Edward con la mirada, para saber con exactitud qué pensaba el lobo, pero se había ido. Agradecí que Jasper no estuviese, Bella sangraba a grandes cantidades, me hubiese abalanzado sobre ella sino hubiese estado bien alimentada. Aunque en realidad evitaba respirar, igual que Rosalie.
-Sigue latiendo, por favor –le decía a Bella mientras la besaba en las manos.
-¿Estás seguro? –preguntó Carlisle.
-Por favor.
Dios sabe que hice todo por evitarlo. Dios lo sabe. No importaba lo que yo hiciera, ella tomaba otra decisión que la volvía a llevar a La Push. 
-¿Cómo fue? –inquirí.
-Un auto, fue muy rápido –la voz le temblaba y las lágrimas comenzaron a salir.
Bella aún en aquella agonía derramaba lágrimas, el dolor la estaba matando más que el golpe en sí.
-Carlisle está sufriendo, ¡hazlo!
-¿No nos atacaran cierto?
-¡NO! Yo soy el alfa –dijo en un tono como aceptando una realidad –nadie hará nada. Sálvela.
No anticipé que el lobo se quedaría a presenciar aquello, Carlisle se acercó a la yugular de Bella con una determinación que ningún otro Cullen tenía. Clavó los colmillos y Rosalie comenzó a gritar desesperada.
-¡NO! Déjala tener un final feliz, ¡Carlisle!
Pero nadie la escuchó. El cuerpo de Bella se crispó en un espasmo, pude oír como su corazón se detenía, bum bum bum…bum…bum… … …. Nada. 
Su cuerpo comenzó a convulsionar. Carlisle retiró los colmillos, le extendí un pañuelo para que se deshiciera de la sangre. 
Jacob estaba en silencio, sujetando con fuerza la mano de Bella. Bajó su oreja hasta su pecho y su mirada se oscureció.
-Se acabó –dijo en un tono frío.
-No…Vivirá –afirmé.
-Bella, por favor… -suplicaba.
-Es hora de que te vayas –le dijo Rosalie mientras lo levantaba del suelo, le abrió la puerta y casi se podría decir que lo sacó de una patada.
-Rose…
-Son todos unos desgraciados, ¿por qué la condenan?
-Rose…no lo tomes así.
-No, tiene razón, Alice. Es una condena. No debí hacerlo. No fue justo, debimos advertirle.
-No. Esto estaba en su futuro, yo ya lo había visto, la decisión estaba tomada.
-TU decisión –me recriminó Rose –porque no hay forma alguna en la que ella haya tomado esta decisión, ¿o sí? ¿O que tú hayas visto la decisión del lobo?
-Yo…
-Sabes que tengo la razón.
-Hice lo que pude por evitarlo –mi voz sonó como un sollozo –pero nada servía, siempre pasaba, lo mejoré tanto como pude, en mi primera visión era su “amado” quien lo hacía o alguno de la manada, no lo sé…
 -Su amado… -bufó –no te das cuentas que los acaban de transformar en enemigos. Malditos sean ustedes dos –dijo señalándonos a Carlisle y a mí.
Se acercó al cuerpo convulsionante de Bella y secó las lágrimas que habían quedado en su rostro.
-Lo siento mucho, Bella.
Aquella clase de compasión no era algo a lo que yo estuviese acostumbrada por parte de Rose. Carlisle se fue, con la cabeza gacha…¿Nos habríamos equivocado?


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Bueno, ahí estuvo, ¿me odian? Si me odian, sólo díganlo en un review...
Aún falta el epílogo que les advierto es bastante triste :)
Y lo de las visiones de Alice, les juro que al principio era Jake quien la mataba.

6 comentarios:

  1. AYAYAYAYAY!!!
    robin por diios!!!
    jajajajaj ese final casi me haces llorar, pobre jake y rose, aunke no puede termianr asi NOOOO!!
    jajaj muy buen fic un besito byeeee ;***

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  2. kasi me haces chillar!! maldita!!! awww no te odio.. ye amo!! pero Dios!1 mi korazon es sensible sabes?? awwwww mi amando Jake!! pobrecito... y explikame komo era la vision de alice ke Jake la mataba?? awwwww ya kero saber!!

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  3. dioos yo si te odio!xD
    me estaba enganxando a tu historia
    porque era como yo la queria..y vas y lo estropeas todo! que maal!
    en fiin..
    ya estoy acostumbrada a que la historia no acabe como me gusta como en amanecer
    que mania tienen todos en que bella sea vampira xD

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  4. wow wow wow wow wow te lo juro llevo tres dias decidiendome si leerlo o no x dios kasi me vuelvo loca,,,,, pero como es eso de ke jacod iba a matar a Bella????
    dios no lo puedo creer y no ties idea de lo ke senti cuando Edward se pone triste por Bella es orrible pero la historia es genial es la respuesta a mi incognita desde ke termine de leer Amanecer ¿Que hubiera pasado si Edward no hubiera sido el principe azul? jajajajajajaja besos enserio lo ame

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  5. ... como has podido hacerme esto?? Aunque la verdad me he quedado un poco pillada, han convertido a Bella en vampiro ??!! o se a muerto??, la verdad es que yo hubiese preferido que Carlisle la salvase a tiempo , y que ella continuara con su vida humana, sería todo mas fácil la verdad =I

    PD irónica: Te volviste loca o te dio un odio increíble hacia Jake?? Tal vez querías sustituir a Bella por ti? , sería todo demasiado fantástico , aunque estaría genial poder sustituir a Bella por alguna fan!! =) Yo me muestro voluntaria .

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  6. que hiciste mujer el fin? no la puedes dejar asi elimina este capitulo,bella y jacob se merencen estar juntos no los separes noooo!!.Me hiciste llorar a mares.Muy bueno tu fic,pero este capitulo no me gusto para nada

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Robin Wolfe